ACEPTO ESTE MOMENTO Y FLUYO.

Continuamente estamos en lucha con el afuera y eso nos tiene en descontento permanente, pero es momento de empezar a darnos cuenta de que aquello que elegimos en cada momento es lo realmente importante: Elegir entre el amor o el miedo. 
Cuando vivimos en la razón, en el drama y el estrés, elegimos nuestras respuestas habituales que generalmente ya sabemos a que dan lugar, un lugar en el que nosotros no estamos, sólo está nuestro intelecto y el «porque siempre ha sido así»
Cuando empezamos a vivir en Atención Plena, en Presecia, nos damos cuenta de que podemos  cambiar esos hábitos que nos llevan siempre al sufrimiento. Realmente somos nosotros los que elegimos sufrir porque vivimos en el papel de víctimas. En este papel siempre creemos que tiene que ver con nuestras circunstancias o con alguien externo que no hace lo que nosotros creemos necesario para ser felices: «Mis hijos no me escuchan», «mis alumnos no prestan atención», » mi pareja no me entiende», » Mi jefe no dialoga»…así interminablemente. 
Cuando comenzamos a cambiar nuestra percepción del mundo cambiamos nuestra resistencia, nuestra visión de la vida, el prisma a través del que miramos. Si limpiamos los cristales de nuestras lentes la percepción del mundo cambia, cambia la resistencia que presentamos a lo que creemos la realidad, cambian nuestras ideas. Cuando nuestra percepción cambia, el mundo cambia porque empieza a reflejarnos a nosotros mismos.
Para muchas personas es imposible imaginar algo así. Es imposible creer en cambiar porque es algo que hay que vivenciar, experimentar para comprobar.
Cuando la experiencia propia se desenvuelve aparece la percepción y el «darse cuenta». 
Cuando nos damos cuenta, podemos cambiar lo categórico y rotundo por la flexibilidad, haciendo que  todo se transforme a través de nuestra visión. Fluir es dejar que la vida se encargue y observar, únicamente observar para descubrir el aprendizaje en el sinsabor. 
Sin oponerse, sin sufrir.
Fluir es descubrir.
Fluir es avanzar siguiendo el ritmo que la vida nos marca.
Desde el amor.

SOLUCIONES BRILLANTES

¿Qué ocurre si unimos creatividad y efectividad?

«Yu el Grande fue un emperador chino que vivió en el siglo XXI antes de C. Encontrándose de muy joven ante la necesidad de afrontar el cíclico problema de las inundaciones periódicas del Río Amarillo, en lugar de hacer construir diques cada vez mayores (como habían hecho con escasos resultados sus predecesores) ordenó que se cavasen agujeros, fosas y canales alrededor de la ciudad para que las aguas del río pudiesen correr sin destruir nada. 

Además de esto, hizo construir a lo largo de los canales los primeros molinos de agua, que le permitieron utilizar su fuerza para moler el arroz. De esta manera Yu, que gracias a esto fue denominado El Grande, venció al enemigo sin oponerse, capturando su fuerza, para después utilizarla en beneficio propio, es decir creó un vacío que luego utilizó.»

Quiero tomar esta historia como ejemplo de intervención ante algo destructivo para transformarlo y canalizarlo hacia aquello que sea beneficioso.
¿Qué hacemos con la rabia, el enfado, la ira, el rencor…? No sólo hacia los demás sino hacia nosotros mismos. Estas emociones conllevan generalmente la incapacidad de reacción que se traduce en una «no agresión exterior» pero en un «castigo interior».
¿Te sientes identificado?
Puedes transformarlo en creatividad y así cambiar al protagonista de la historia:
Tú, el Grande.

HISTORIA DE UN RECHAZO EN 265 EXCUSAS O MENOS.

Hechos, personas, circunstancias, que como maravillosos espejos, la vida siempre nos pone delante para que aprendamos y saquemos lo mejor de nosotros creando una magnífica realidad.
Aquello que nos molesta del otro es lo que tenemos que arreglar en nosotros mismos.
Las cualidades ajenas que admiramos son las propias que no damos salida por miedo.
Un ego desmedido enseña a acallar a otro tal para que se abrace a la humildad, y los seres más sensibles se esconden detrás de ese muro protector. Si observamos bien, siempre hay amabilidad detrás de nuestro reflejo.
Perdonarse, perdonar, Agradecer, Aprender, Crecer, Respetar, Tolerar, acoger todo con Confianza, Amor incondicional y desde el Humor.
Esta es la HISTORIA DE UN RECHAZO EN 265 EXCUSAS, O MENOS.
¿VOY?
-Hoy no puede ser, se me hace tarde.
-Estoy acompañado y después sin compañía.
-Voy en el metro y luego me subo al patinete.
-En este instante vuelo a Tenerife, mañana a la luna y la semana que viene parto hacia Plutón.
-No puedo perder un momento contigo porque el tiempo se me cae por los agujeros de los bolsillos.
¿PUEDES VENIR?
-Hoy se me complica.
-Estoy ocupado sin hacer nada.
-El punto de cruz me reclama.
-He comenzado, just now, la meditación Vipassana.
-Me siento mareado y sin vigor.
-Tengo la sonrisa triste, la estoy intentando arreglar.
-Brillo hacia otra dirección y vibro en otra frecuencia.
-Tengo una llamada en espera desde ayer.
¿QUIERES COMPAÑÍA?
-Buff!! hoy no va poder ser!!
-Tres son multitud.
-Tengo partida de mus.
-Ya la llevo puesta, gracias.
-¿Para?
-Puedo pensarlo un día o dos? Ya te aviso con lo que sea.
-Me quedan tres misterios del rosario, el acto de contrición y la señal de la cruz.
¿QUEDAMOS?
-¿Este año?
-Ahora hace frío y después tendré calor.
-No vas muy rápido para tanta lentitud.
-Había hecho planes con mis tortugas.
-Estoy en ejercicios espirituales.
-Lo siento, tengo la urgente necesidad de pelar las lentejas.
¿QUÉ NECESITAS DE MÍ?
-Distancia.
– Es una ligera sensación pero…creo que me rechaza!!

TALLER EL NIÑO INTERIOR. LA CLAVE DE LA AUTOESTIMA

Domingo 29/03/2015. 10.00-14.00

La casina del árbol.

Espacio de Convivencia y Aprendizaje Integral 

lacasinadelarbol@gmail.com 
La Reguera 8, Antiguo Llaranes. Avilés.

El Niño Interior simboliza nuestro ser emocional, esa parte nuestra que creció en un entorno familiar determinado, y que, a muy temprana edad empezó a ser condicionado a través de la culpa, la crítica, el miedo, el rechazo,….motivo una parte fundamental del viaje de autoconocimiento tiene que ver con la comunicación con nuestro Niño Interior Herido.

Podemos aprender a escucharle, abrazarle, acoger sus sentimientos, educarle y ponerle límites saludables a sus reacciones y comportamientos.

El Niño Interior nos recuerda nuestro poder esencial y nuestra capacidad para realizarnos plenamente a lo largo de nuestra vida.

Inversión: 40€
Promoción: primera vez a un taller: 30€
Promoción: Invito a un amigo: dos personas…60€