Cuando en una relación existe desequilibrio, cuando la cesión ocurre siempre, nace la relación descompensada.  La consideración hacia uno mismo, la autoestima, hace que prevalezca nuestra propia opinión sin que consideremos otras como una amenaza sino como una visión diferente de las circunstancias, otro criterio a tener en cuenta…o no.

Contener el sentir de otro sin juzgar no significa estar siempre de acuerdo, sino desapegarse de las propias creencias y concienciarse de que si esa persona está ahí es porque hay algo que aprender de ella, y también de las que puedan aparecer.

Podemos considerar la terminación de un vínculo como un fracaso o la puerta hacia nuevas e interesantes posibilidades, hacia otros horizontes de los que aprender. Como me dijo una amiga: «terminar puede significar un profundo duelo o una absoluta liberación»

Aflojar, transcender, y abrirse a lo nuevo.
«Se la vie», si quieres que sea así, desde el amor.