Lo que las crisis demuestran.
Estamos acostumbrados a llenar la vida con cosas que nos proporcionan comodidad y seguridad, quizá durante algún tiempo. Nos refugiamos, o escondemos, en el trabajo, en la ocupación, en el esfuerzo por mejorar, en cuidar a los demás, en el éxito, en el elogio, en el dinero, en las adicciones, en el exceso. Cada quien es cada cual y va haciendo como quiere o puede.
Las crisis nos demuestran que estos oasis, o espejismos creados, no impiden el dolor de la pérdida. La indefensión y la vulnerabilidad evita que confiemos en la vida. Aceptar lo que hay, tal cual son las circunstancias. No podemos entender la naturaleza de la realidad, porque es difícil estar presente en medio de circunstancias dolorosas y difíciles.
La práctica del Mindfulness ayuda a practicar la presencia y a establecer una base calmada en la que anclarnos ante cualquier situación. Atender a la emoción que sentimos, para darle cabida en lugar de rechazarla.
Te regalo una práctica para que encuentres el oasis en ti.